Hay que diferenciar Utilidad y Efectivo, porque las utilidades no siempre son monetarias, pueden obedecer a estrategias contables como: depreciaciones o amortizaciones.
No necesariamente un gasto significa que salió efectivo de nuestra empresa. Y por otro lado, la utilidad no nos sirve de mucho si nos la van a pagar nuestros clientes en dos, tres o seis meses.
El efectivo es el rey. Es con efectivo con lo pagamos salarios de nuestros equipos, oficinas, suministros, proveedores, etc. Es por esto que cuidar el efectivo, cuidar el flujo de caja, es muy importante.
El Objetivo Financiero básico es: Crear y maximizar valor , no utilidades.
Hay diversos tipos de valor: de uso, económico, cultural, de percepción, y el más importante, de mercado. Para medir el valor se requieren algunas herramientas mínimas: la economía, las matemáticas y las estadísticas. La forma en la que se valoran las empresas, cuando ya son maduras, es en base al flujo de efectivo y su proyección a futuro, no las utilidades.
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