Estructura de Secuencias en Relatos Audiovisuales

Clase 7 de 19Curso para Crear Contenido con Enfoque Documental

Resumen

¿Cómo estructurar una historia audiovisual?

Contar historias es una habilidad poderosa y, cuando se trata de hacerlo con medios audiovisuales, la estructura es clave. Este proceso va más allá del simple montaje de clips; se trata de organizar imágenes y sonidos de manera que hagan justicia a la historia que se quiere contar. Por eso es esencial entender los componentes básicos del lenguaje audiovisual y cómo se integran para formar un relato cohesivo.

¿Qué elementos componen el lenguaje audiovisual?

Para adentrarnos en la narrativa audiovisual, es beneficioso conocer algunos conceptos básicos:

  • El plano: Es la unidad mínima narrativa en el lenguaje audiovisual. Comprende lo que ocurre entre dos cortes y mantiene un mismo tiempo y espacio.
  • La escena: Es un conjunto de planos que ocurren consecutivamente en un mismo tiempo y espacio.
  • La secuencia: Está formada por un conjunto de escenas que comparten una idea o tema común. Es la unidad narrativa que nos permitirá estructurar nuestro relato audiovisual.

Con estos elementos en mente, podemos comenzar a componer una estructura secuencial, que es esencialmente organizar la narrativa en bloques temáticos.

¿Cómo organizar un relato en bloques temáticos?

La estructura secuencial que va a guiar tu historia debe responder a ciertos parámetros básicos:

  1. Contenido: Define claramente qué sucederá en cada secuencia.
  2. Imagen: Establece qué se verá durante la secuencia.
  3. Sonido: Describe los elementos sonoros que acompañarán las imágenes.
  4. Tiempo: Determina la duración estimada de cada secuencia.

Personalmente, se recomienda comenzar con una estructura clásica de introducción, desarrollo y cierre. Esto implica dividir la historia en bloques temáticos, asegurándose de que cada uno cumpla una función clara y justificada dentro de la narrativa.

¿Por qué es importante el objetivo de cada secuencia?

Cada secuencia debe tener un propósito claro que contribuya a la progresión dramática de la historia. Esto evita que se incluyan elementos al azar y garantiza que todo lo presente en el relato tenga un porqué.

  • Progresión dramática: Asegúrate de que la historia avanza de manera lógica y emotiva.
  • Evita distracciones: Focaliza en el tema central y el mensaje que quieres transmitir.
  • Función clara: Entiende la función de cada secuencia en el contexto del relato global.

¿Cómo evitar errores comunes al estructurar historias?

Uno de los errores más comunes es basar la estructura de la historia en los personajes o fuentes informativas. Sin embargo, lo ideal es que el relato se organice en bloques temáticos:

  • Centrarse en el tema: Prioriza el tema sobre personajes o fuentes.
  • Mensajes claros: Define y sigue consistentemente el mensaje que deseas comunicar.

Un caso práctico es el cortometraje documental "La memoria de Tati", en el que la estructura temática ayudó a visualizar la progresión dramática del relato. El fragmento de esta estructura está disponible como recurso educativo y puede servir de inspiración para crear tu propio modelo.

¿Cuál es el siguiente paso tras definir la estructura?

Una vez que hayas definido la estructura secuencial de tu historia, el siguiente paso es pensar en la estética y cómo deseas que se presente audiovisual. Esto involucra seleccionar herramientas técnicas y recursos visuales para darle vida a tu visión.

  • Propuesta estética: Decide cómo quieres que se perciba visualmente la película.
  • Recursos visuales: Elige adecuadamente qué elementos tecnológicos y de imagen enriquecerán la narrativa.

A medida que avanzas, recuerda que la creación de un relato audiovisual es un viaje de aprendizaje continuo. No tengas miedo de experimentar y de ser valiente en tus decisiones creativas. ¡Sigue adelante y transforma tus ideas en historias visualmente impactantes!