Estrategias para Mantener la Motivación en Proyectos Largos
Clase 6 de 11 • Curso de Productividad y Organización
Resumen
Estas estrategias te ayudarán a mantener la motivación, sobre todo en proyectos de mediano y largo plazo.
1. Que tus proyectos cuenten una historia
Organiza tu proyecto en función de una estructura narrativa:
- Arranque: inicio fuerte, capta atención y te da un motivo para seguir viendo
- Meseta: se desarrolla la historia apuntando a un clímax
- Clímax: momento de mayor intensidad, compromiso y desahogo emocional
- Resolución: liberación de tensión
Esta estrategia permite comenzar con motivación, pero no quemarla muy pronto. Le da sentido al proyecto y te ayuda a retrasar la gratificación. Además, esto ayuda a distribuir las tareas de modo que se considere la energía emocional, y a tener un mayor control al cierre del proyecto.
2. Considera los hitos
Un hito es una meta o logro, una barrera para atravesar. Son esas cosas que esperas que sucedan en cada punto del proyecto. Deben ser constantes, observables y medibles, además de pequeños y progresivos. Una recomendación es que al completar un hito, te recompenses con una experiencia en vez de con un objeto.
3. Fake it ‘til you make it
Haz las cosas aun si no tienes motivación. Actúa como si la tuvieras.
“No esperes que llegue la motivación para iniciar, sino inicia para motivarte.”
César Galicia
“La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando.”
Picasso
4. La incomodidad es tu aliada
La incomodidad es un gran estímulo interno que puede motivar a la acción. El estar incómodos nos motiva a resolver cualquier situación. Usa la incomodidad a tu favor generando circunstancias que te obliguen a resolverlas por hartazgo.
- Regla de oro: nunca te incomodes con tus necesidades fisiológicas/sociales (hambre, sueño, ir al baño, ver amistades)
5. Divagar es el rasgo de las mentes creativas, no es un error
¿Has notado cómo las “mejores” ideas llegan en los “peores” momentos? Ya sea que estés cocinando, bañándote, etc. En este tipo de situaciones de atención pasiva, el cerebro tiene una mayor flexibilidad que lleva a la creatividad.
Resuelve problemas divagando:
- Cuando sientas que no puedes resolver un problema, deja ese problema y ponte a hacer otra actividad que requiera menos atención.
- Recuperarás energía, te relajarás y permitirás a tu cerebro entrar en el modo que necesita para resolver el problema.
Evidentemente, hay momentos en los que es más conveniente enfocar nuestro cerebro en la eficiencia más que en la creatividad. Hablaremos de ello aquí.
Contribución creada con aportes de: Ciro Villafraz y Silvina Fernanda Acosta.