Creando un frame para escribir chistes o historias cortas

Clase 10 de 12Curso Básico de Escritura Creativa

Resumen

Los frames pueden utilizarse como un medio que nos ayuda a crear chistes o historias cortas. Aquí veremos cómo aplicarlos.

Un chiste es breve

Por lo general, un chiste es breve. Por lo tanto, para contar un chiste se requiere una economía de medios. A eso lo llamamos frame o uso de cuadro.

¿Qué es un frame o cuadro?

La teoría del frame viene de la computación y fue adaptada por la semiótica para crear historias breves.

En palabras de Marvin Minsky, un cuadro o frame es una “estructura de datos que sirve para representar una situación estereotipada(…). Cada frame incluye cierta cantidad de informaciones. Algunas se refieren
a lo que alguien puede esperar que ocurra a continuación”
.

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Un frame forma parte de nuestra estructura mental a través de una estructura de datos. Por lo tanto, son informaciones que están en nuestra memoria y generalmente, representan una situación estereotipada a nivel cultural, general, etc.

El frame representa una situación en la cual nosotros esperamos determinados finales. Por ejemplo:

  • Una mamá paseando a su hijo en el parque, esperamos que ella se ponga a leer o que el niño se caiga mientras juega.
  • Si una doncella está durmiendo y aparece un vampiro, esperamos que él se acerque a su cuello y le chupe la sangre.

Frames comunes

El cuadro o frame te ahorra explicación o información de contexto, pues son de carácter universal y, por lo tanto, van directo al grano.

Algunos frames comunes que se utilizan en las historias:

  • Jaimito o Pepito: solemos usarlos como ejemplo para contar historias de niños traviesos.
  • Te voy a contar un chiste de Pepito
  • Bruja del bosque
  • Vacaciones en la playa

Ejemplo de frame

Un ejemplo de frame es el cuento Había una vez de Javier Quiroga:

  • La frase “Había una vez” de inmediato nos lleva a pensar en el mundo de los cuentos de hadas, donde hay princesas, magia, etc.
  • En el setup habla sobre un “apuesto joven” y “zapatillas”, haciendo que el lector se imagine una historia similar a la de Cenicienta.
  • Pero tiene un punch en el párrafo final al cambiar la intención por un final inesperado: que la mujer queda arrestada.
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Contribución creada con aportes de María Jesús Pérez Bidegain