Cambio de Perspectiva para Resolver Problemas Laborales

Clase 3 de 16Curso de Pensamiento Estratégico

Resumen

Cuando Marta ingresó como analista de datos en una empresa tecnológica, se encontró rápidamente con un jefe poco comunicativo. Las instrucciones eran vagas, los objetivos poco claros y la retroalimentación inexistente. Al principio, Marta comenzó a cuestionarse constantemente: "¿Por qué me tocó un jefe así?", "¿De quién es la culpa de esta situación?", "¿Estoy haciendo algo mal?". Estas preguntas, lejos de ayudarla, solo aumentaron su frustración y ansiedad.

Marta se dio cuenta de que estas preguntas negativas la mantenían atrapada en un ciclo improductivo, enfocada en sus debilidades, en el miedo a perder su empleo y en escenarios negativos que jamás sucedieron. Observó cómo esta perspectiva afectaba su confianza personal, llevándola a dudar de sus propias capacidades y habilidades.

Un día, conversando con una colega experimentada, Marta entendió la importancia de cambiar el marco de referencia. En lugar de concentrarse en la culpa o en lo negativo, comenzó a ampliar su perspectiva. Preguntas como "¿Qué puedo aprender de esta situación?", "¿Qué recursos o habilidades puedo utilizar para mejorar mi comunicación con mi jefe?" y "¿Cuáles son las oportunidades que esta situación me ofrece?" comenzaron a ocupar su mente.

Este cambio permitió a Marta considerar el contexto completo, identificar aspectos que antes no había percibido y buscar soluciones creativas. Por ejemplo, en lugar de culpar a su jefe por no dar instrucciones claras, Marta decidió proponer reuniones semanales para revisar el avance de sus tareas y clarificar expectativas. Además, comenzó a visualizar escenarios positivos donde su comunicación y desempeño mejoraban notablemente.

Al adoptar una actitud proactiva y asertiva, Marta dejó atrás la resistencia reactiva que la mantenía en una postura defensiva y limitaba su capacidad de respuesta. Reconoció que enfocarse en sus fortalezas en lugar de sus debilidades la ayudaba a actuar con más seguridad y efectividad.

Con el tiempo, este nuevo enfoque no solo mejoró su relación laboral con su jefe, sino que también reforzó su confianza personal y profesional. Marta comprendió que pensar estratégicamente no es solo una habilidad laboral, sino una herramienta poderosa para enfrentar y resolver diversos desafíos cotidianos.