Qué quiero vender vs. lo que buscan mis clientes

Al trabajar en un negocio visualizamos qué queremos hacer.

Trabajar haciendo algo que nos gusta está bien, pero el mercado envía señales que muchas veces no logramos interpretar, o en el peor de los casos, sí interpretamos pero no hacemos caso.

Es muy probable que cuando mostramos un producto nuevo, el mercado nos pida algo diferente. En estos casos tenemos que optimizar nuestro negocio para ofrecer estos nuevos servicios, o evaluar la forma en la que adquirimos nuestros clientes, ya que es probable que nuestro producto esté optimizado para un público distinto.

Entender correctamente estas señales y patrones en nuestros usuarios es la clave para que nuestro negocio ofrezca servicios que nuestros clientes estén dispuestos a comprar.