Creación de contenido SEO con inteligencia artificial paso a paso

Clase 15 de 18Curso de Inteligencia Artificial para SEO

Resumen

El uso de inteligencia artificial en la creación de contenidos SEO genera muchas dudas, pero aplicado correctamente puede facilitar el trabajo editorial y aportar valor al posicionamiento web. Para aprovechar al máximo estas herramientas, es fundamental emplearlas como un apoyo en la investigación y redacción, no como una solución automática que reemplaza la creatividad y el criterio humano.

¿Qué recomienda Google sobre crear contenido con inteligencia artificial?

Google permite usar inteligencia artificial para la creación de contenido, siempre que este aporte una respuesta útil y precisa a la intención de búsqueda de cada persona. El secreto no es automatizar, sino acompañar a la herramienta y guiarla paso a paso. Esto asegura que el resultado final cumpla con los lineamientos y no infrinja ninguna política del buscador.

¿Cómo lograr contenido web digerible y optimizado para SEO?

La inteligencia artificial suele generar textos con párrafos largos y repetitivos, más apropiados para interfaces de AI que para páginas web. Es necesario trabajar de cerca con la herramienta y ajustar cada output para lograr un formato ideal:

  • Párrafos breves (entre tres y cinco líneas), fáciles de leer en web.
  • Corrección gramatical y de estilo, especialmente en títulos y subtítulos generados automáticamente.
  • Conversión de límites de caracteres a tokens para mejorar la precisión del output de ChatGPT.
  • Insistir con instrucciones claras y específicas, como: “párrafos de entre treinta y cinco y sesenta tokens”.
  • Separar ideas y listas cuando corresponda, solicitando explícitamente formatos de listado.

¿Cuál es el proceso recomendado para crear contenido SEO con ChatGPT?

  1. Definir un brief claro, con título SEO, introducción sugerida y estructura general (outlines o subtítulos para cada sección).
  2. Construir el contenido sobre ese brief, pidiendo outputs específicos:
  3. Explicar el tema de cada sección.
  4. Usar instrucciones muy detalladas sobre longitud y formato.
  5. Pedir listas concretas cuando la información lo requiera.
  6. Tomar los resultados como una base para luego corregir, pulir y adaptar a la voz humana.
  7. Integrar respuestas a preguntas específicas alineadas con las secciones del outline.
  8. Revisar todo el contenido antes de publicarlo, asegurando claridad, legibilidad y coherencia.

La clave está en ver a la inteligencia artificial como un asistente de redacción. Así, se aprovecha su velocidad y capacidad, pero siempre bajo el control y revisión de una persona que garantiza la calidad del texto. ¿Te gustaría saber más sobre cómo optimizar tus procesos editoriales con IA? Comparte tus dudas o experiencias.