Aplicar habilidades sociales en conversaciones difíciles con los clientes

Clase 7 de 9Curso de Inteligencia Emocional para Servicio al Cliente

Resumen

Las habilidades sociales son la capacidad de cooperar con otras personas o realizar actividades en sociedad de manera efectiva, por medio de la comunicación. Algunas de estas habilidades son:

  • Habilidades de comunicación
  • Empatía
  • Paciencia
  • Manejo de estrés
  • Flexibilidad
  • Carisma

¿Cuáles son las conversaciones difíciles?

Las conversaciones difíciles hacen referencia a aquellas interacciones en las cuales nos sentimos incómodas o incómodos debido a la manera en que debemos abordar temas delicados o controversiales.

Estas conversaciones pueden abarcar una amplia gama de temas, como negociaciones laborales, críticas constructivas, discusiones sobre valores personales o incluso situaciones de conflicto interpersonal. Son llamadas “difíciles” porque pueden generar tensión, estrés y malestar emocional.

¿Cómo manejar las conversaciones difíciles?

Manejar adecuadamente las conversaciones difíciles puede ser un desafío, pero existen estrategias que nos pueden ayudar a abordar estas situaciones de manera efectiva. Aquí te presento algunas recomendaciones:

1. Preparación

Antes de iniciar la conversación, es importante planificar lo que deseamos comunicar y anticipar posibles reacciones o respuestas. Esto nos permite estar mejor preparados para lidiar con cualquier situación que surja durante la conversación.

2. Escucha activa

Durante la conversación, es esencial practicar la escucha activa, prestando atención a lo que la otra persona está diciendo y tratando de comprender su perspectiva. Esto nos permite establecer una comunicación más efectiva y evitar malentendidos.

3. Afirmaciones en lugar de acusaciones

En lugar de acusar o culpar a la otra persona, es mejor utilizar afirmaciones y expresar cómo nos sentimos con relación a la situación. Esto ayuda a promover un ambiente de diálogo en lugar de defensa.

4. Control emocional

Es importante mantener la calma y controlar nuestras emociones durante la conversación. Si nos dejamos llevar por la ira o la frustración, es más probable que la conversación se vuelva aún más difícil. Respirar profundamente y tomarse un momento para calmarse puede ser de gran ayuda.

5. Búsqueda de soluciones

En lugar de enfocarse en culpar a la otra persona, es mejor centrarse en buscar soluciones y encontrar un terreno común. Trabajar juntos para encontrar una manera mutuamente beneficiosa de resolver el problema puede ayudar a cambiar la dinámica de la conversación.

6. Apoyo y respeto mutuo

Durante la conversación, es relevante mostrar apoyo y respeto mutuo. Reconocer y validar los sentimientos y puntos de vista de la otra persona puede ayudar a establecer una base sólida para el diálogo y promover una comunicación más efectiva.