Modelo Transteórico del Cambio de Comportamiento: Etapas y Estrategias
Clase 3 de 21 • Curso de Salud y Bienestar en el Mundo Actual
Resumen
¿Qué es el modelo transteórico de cambio de comportamiento?
El modelo transteórico de cambio de comportamiento es una herramienta poderosa para quienes buscan entender y modificar sus hábitos. Se trata de un enfoque psicológico que identifica en qué etapa de cambio está una persona cuando enfrenta cambios significativos en su estilo de vida. Este modelo divide el proceso de cambio en cinco etapas que cualquier persona puede experimentar a lo largo de su vida: precontemplación, contemplación, preparación, acción y mantenimiento. Conocer estas etapas puede convertirse en una guía para lograr objetivos de salud y bienestar de manera más efectiva.
¿Cómo se caracteriza cada etapa del modelo?
¿En qué consiste la etapa de precontemplación?
En la etapa de precontemplación, la persona no muestra interés en cambiar su comportamiento. Esto puede deberse a la falta de información o a una subestimación del impacto del hábito en cuestión. Aunque puede haber presión externa de familiares, amigos o médicos para cambiar, el individuo aún no está listo. Aquí, la clave es aumentar la comprensión y la educación sobre el hábito y su impacto en la salud, preparando así el terreno para avanzar en el modelo.
¿Qué sucede durante la etapa de contemplación?
La etapa de contemplación es un momento de reflexión interna. Uno comienza a reconocer la necesidad de cambiar, pero también sopesa las consecuencias del cambio. Este análisis, conocido como ambivalencia, es muy común. Por ejemplo, alguien que desea dejar de fumar puede temer aumentar de peso. La clave aquí es identificar los obstáculos y mantener una actitud amable con uno mismo, sabiendo que con determinación, el cambio es posible.
¿Cómo se define la etapa de preparación?
Llegar a la etapa de preparación significa que se ha tomado la decisión de cambiar. Se comienzan a dar pasos concretos hacia el objetivo. Por ejemplo, si el objetivo es aumentar la actividad física, se podría comprar equipamiento nuevo o inscribirse en clases. Esta etapa requiere saber cómo establecer metas de manera eficiente. Establecer metas claras y alcanzables es crucial para pasar con éxito a la siguiente etapa.
¿Qué implica la etapa de acción?
En la etapa de acción, el nuevo hábito se ha integrado en la rutina diaria. Aunque no ha pasado suficiente tiempo para que el cambio sea permanente, se han recorrido entre uno y cinco meses. Aquí, la recaída en viejos hábitos es normal y no debe ser motivo de culpa. Es un período en el que se necesita mucho apoyo y confianza para superar desafíos. Planificar de antemano ayuda a enfrentar obstáculos y avanzar hacia la siguiente etapa.
¿Cómo se logra el mantenimiento?
La etapa de mantenimiento se alcanza cuando el nuevo hábito se ha sostenido durante al menos seis meses. La confianza en el cambio es alta, aunque siempre existe la posibilidad de recaídas debido a situaciones desafiantes. En este punto, contar con un sólido grupo de apoyo es vital. Familia, amigos o compañeros de clase pueden ofrecer la motivación y seguridad necesarias para continuar el cambio.
¿Cómo aplicar el modelo transteórico a tus hábitos?
Para aplicar este modelo en tu vida, reflexiona sobre un hábito que desees cambiar y que no esté contribuyendo a tu bienestar. Identifica en qué etapa del modelo te encuentras y diseña tres estrategias para avanzar hacia la próxima etapa. Comparte tus hallazgos y experiencias con otros, ya que crear una red de apoyo no solo te beneficia a ti, sino también a tus compañeros.
¿Por qué compartir tus experiencias es importante?
Compartir tus experiencias en un panel de discusión ofrece retroalimentación valiosa y fortalece el grupo de apoyo. Es una oportunidad para aprender de los demás y aportar en su camino hacia un estilo de vida más saludable. La colaboración y el apoyo mutuo son esenciales para el éxito en el bienestar personal. Así pues, no dudes en interactuar, dar y recibir motivación para seguir adelante.
Tu trayecto hacia el cambio de hábitos es único, pero al compartirlo, enriqueces tu propia experiencia y la de los demás. Aprovecha estos aprendizajes, persevera en tus objetivos, y recuerda que el cambio auténtico nunca llega solo: se cultiva, se comparte y se celebra.