Comunicación Productiva: Escucha Comprometida y Hablar Responsable

Clase 8 de 26Curso de Desarrollo de Habilidades Blandas para Equipos de Trabajo

Resumen

¿Qué es la comunicación productiva y por qué es importante?

En una era donde las relaciones lo son todo, saber comunicarse de manera eficaz y sana se convierte en una habilidad indispensable. La comunicación productiva es un modelo propuesto para mejorar nuestra interacción con los demás, buscando no solo el intercambio de información, sino también el establecimiento de una acción común en la relación. Esto implica priorizar el vínculo y utilizar el mensaje como herramienta para alcanzar el objetivo deseado.

¿Cómo se diferencia conversar de comunicarse?

Un aspecto crucial de la comunicación productiva es distinguir entre conversar y comunicarse. Si bien toda comunicación incluye una conversación, no toda conversación constituye una verdadera comunicación. Para que exista comunicación, debe haber una intención clara de lograr un resultado común. Esto significa que cuando nos comunicamos, hay una acción que deseamos llevar a cabo en conjunto.

¿Cuáles son las competencias claves para una comunicación productiva?

Desarrollar habilidades conversacionales es fundamental para lograr una comunicación efectiva y productiva. En este modelo se destacan dos competencias esenciales:

  • Escucha comprometida: Implica validar al otro, siempre priorizando la relación y la acción conjunta. Es más que oír; es prestar atención y valorar la perspectiva de quien habla.
  • Hablar responsablemente: Se trata de cuidar el equilibrio entre lo que decimos, teniendo en cuenta el momento, el lugar y el contexto para asegurar que nuestro mensaje sea recibido como deseamos.

Estas competencias permiten mejorar la calidad de nuestras interacciones, transformando la manera en que nos relacionamos en diferentes ámbitos de la vida.

¿Cómo empezar a aplicar estas habilidades en el día a día?

Para fomentar una comunicación productiva en nuestras vidas cotidianas:

  1. Escucha activamente: Dedica tiempo a realmente comprender al otro antes de formular tu respuesta. Esto ayuda a fortalecer las relaciones y a construir confianza.
  2. Cuida tus palabras: Sé consciente de tu lenguaje y expresión. Considera si tu mensaje será recibido de la manera que pretendes.
  3. Fomenta el diálogo abierto: Permite que los demás compartan sus opiniones y perspectivas, creando un ambiente de respeto y colaboración.

Con esfuerzo y práctica, podemos mejorar nuestra capacidad de comunicarnos de manera productiva, llevando las relaciones a un nuevo nivel de entendimiento y acción conjunta. ¡Atrévete a comunicarte mejor y transforma tus interacciones en oportunidades de crecimiento mutuo!