Cada 25 de noviembre, personas y organizaciones comprometidas con los derechos humanos y la equidad nos pintamos de naranja, el color insignia para reclamar un mundo libre de violencia hacia mujeres y niñas.
Empezar a visibilizar la lucha por alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 5: Igualdad de Género inicia eliminando de nuestro comportamiento cualquier signo de violencia hacia la mujer.
Muchas personas me han criticado por usar la palabra “agresión” o “violencia” en un contexto muy cotidiano, pero es importante llamar a las cosas por su nombre. Claro está, hay niveles de violencia más claros y detestables, como es el femicidio o la violencia sexual, pero hay otras manifestaciones menos evidentes y debemos saber identificarlas.
La violencia hacia niñas y mujeres es una de las violaciones a los derechos humanos más extendidas a nivel mundial. Según ONU Mujeres, durante la crisis sanitaria del 2020, 2 de cada 3 mujeres sufrió algún tipo de violencia o conocía a alguna que la sufría. Todas las mujeres podemos ser víctimas de violencia, pero, con certeza, sabemos que hay más riesgo para aquellas en condiciones de vulnerabilidad socioeconómica.
Defino la violencia hacia niñas y mujeres como cualquier acto u omisión que implique amenazas o atentados contra la integridad física, mental, emocional y económica, partiendo de una discriminación basada en género, es decir, por la condición de ser mujer. Si bien es cierto los hombres también son víctimas de agresiones, no se parte del mismo principio basado en el supuesto poder o autoridad de un género sobre el otro.
El 25 de noviembre es una fecha en la que te invito a reflexionar sobre el tema y si te consideras ser parte del grupo que dice: ¡Basta Ya!, te invito a que te vistas de naranja, publica en tus redes utilizando hashtags como: #Niunamenos, #Pintaalmundodenaranja, #25N.
¿Qué otros me sugieres?
Ivannia Murillo
Psicóloga especialista en equidad de género y derechos humanos
Super importante hablar de estos temas con los hombres cercanos para ayudarlos a ver esos momentos de micromachismo en los que pueden estar participando sin darse cuenta. Creo que es necesario educar a los hombres de casa, de círculos cercanos para que ellos se conviertan en un ejemplo de igualdad de género y respeto.
SIN DUDA ALGUNA
Excelente post, gracias por compartirlo.
Muy buen artículo, esperemos que todos podamos tomar conciencia y promover la educación temprana, tanto en los colegios y sobre todo en las familias, que desde niños, respetemos a nuestras mujeres en la familia, desde las hermanas, madre, primas, etc y podamos crecer con esos valores. Tuve la suerte que mi padre siempre respeto a mi madre, si discutían, como todas las parejas, pero nunca vi un acto de violencia, y desde el ejemplo es la mejor manera de enseñar.
Creo que hay que destacar, el respeto y el amor, como estandarte.
En 15 años esta manera de enfrentar problemas va a ser igual de obsoleta y obstaculizante que siempre, pero la percepcion masiva de esta, va a ser mucho más clara, haciendo notar sus escencia ridiculamente emocional y poco practica.
Para los humanos con intenciones transparentes y proactivas que tienen una percepción “positiva” de este fenomeno irracional, recomendaría adoptar la razón y mutar de propuesta.
Exploten sus activos de maneras mas eficientes.
La mutación guiada por la maximización de la eficiencia elimina procesos innecesarios y se centra en la ejecución de acciones con mayor impacto.
Es maravilloso que Platzi apoye a la mujer en la tecnología y también en su vida.
Debemos evitar la violencia y el maltrato contra las niñas y mujeres en el mundo. merecen nuestro amor, apoyo y respeto.
No Mas Violencia Contra La Mujer
Defiende tu vida, lucha por tu independencia, busca tu felicidad y aprende a quererte
Izaskun González.