La procrastinación… "el vicio de dejar todo para después”

Curso de Inteligencia Emocional

Toma las primeras clases gratis

COMPARTE ESTE ARTÍCULO Y MUESTRA LO QUE APRENDISTE

Cuantas veces hemos dicho “debo hacer X cosa importante”, como por ejemplo tomar un curso, estudiar para un examen, mejorar nuestro perfil en LinkedIn, buscar nuevas oportunidades laborales, etc., pero en vez de tomarnos el tiempo de hacerlas nos ocupamos de otras tareas que son irrelevantes comparado a lo que realmente deberíamos estar haciendo. Cuando posponemos una actividad supliéndola con otra de menor importancia entramos en el mundo de la procrastinación…

Pero… ¿Qué es procrastinar?
Básicamente procrastinar es dejar todo para después. Podemos definir a la procrastinación, postergación o posposición a la acción o habito de retrasar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables.

¿Por qué procrastinamos?

Existen muchos motivos que nos llevan a “dejar todo para después”, S.J. Scott en su libro “23 Hábitos Anti-procrastinación” menciona que existen 7 excusas que la gente da para postergar sus actividades:

Excusa 1: “No importa” La gente a menudo evita tareas que no parecen importantes. En ocasiones no es que sean urgentes. Otras veces es una tarea desagradable que no se relaciona con el objetivo final a largo plazo. Y, a menudo, requiere que acabes con un miedo mayor. No importa lo que pase por tu cabeza, hay ocasiones en que posponemos una tarea porque no parece ser importante.

Excusa 2: “Necesito hacer ____, primero.” Los proyectos a menudo se quedan colgados porque una tarea específica necesita ser completada antes haciendo cualquier cosa. Ya sea una llamada telefónica, un proyecto conflictivo, o una simple compra, es fácil procrastinar cuando hay algo que necesita hacerse antes que cualquier cosa.

Excusa 3: “Necesito más información para comenzar.” A veces es una excusa válida. A menudo tomamos tareas que requieren investigación extensa antes de comenzarse. De todos modos, no creo que sea una excusa válida si lo haces semanalmente. Con el riesgo de sonar sarcástico, la solución más simple a esta excusa es obtener más información. No saber cómo hacer algo, nunca debería ser una razón para evitar un proyecto. Hoy en día, es posible aprender cualquier habilidad o encontrar a alguien más que lo haga por ti.

Excusa 4: “Me siento agobiado y tengo mucho que hacer.” Todos vivimos esos momentos en que nos sentimos agobiados. Parece que no importa cuán duro trabajemos, nuestras listas de deberes nunca terminan. Usualmente, este problema sucede a gente que posee “Mentalidad de Superman” donde se sienten personalmente responsables de hacer todo por sí mismos.

Excusa 5 “No tengo tiempo en este momento.” De nuevo, esta es una excusa completamente válida. A veces, estas enfocado en un proyecto y no tiene sentido comenzar otro. De cualquier modo, la excusa “sin tiempo” a menudo se vuelve un hábito horrible de procrastinación donde estás siempre posponiendo cosas importantes.

Excusa 6: “Sigo olvidando hacerlo” La gente a menudo procrastina una tarea porque olvidan hacerla. Seguro, todos tenemos esos momentos cuando algo se va de tu mente. Sin embargo, ser crónicamente olvidadizo es un signo de un profundo asentamiento de resistencia hacia una tarea específica.

Excusa 7: “No tengo ganas de hacerlo” Seguro, siempre habrá tareas poco placenteras a las que tememos. El secreto es saber cuándo algo necesita hacerse y cuando puede ser permanentemente eliminada. A menudo confundimos los dos evadiendo tareas que pueden tener un impacto positivo a largo plazo. Eso significa que, incluso si no quieres hacer algo, eso no debería ser razón para posponerlo. La mejor solución es analizar por qué temes hacer esa tarea para ver si es un síntoma o un problema más grande

¡Dejemos de postergar!

No es que podemos dejar este hábito de la noche a la mañana, sino que debemos tener determinación y por sobre todo mucha disciplina. Lo principal es planificar nuestras actividades estableciendo un plazo determinado para poder desarrollarlas en tiempo y forma, además de esto tenemos que evitar todo tipo de distracción (celular, televisión o cualquier medio que no nos sea de utilidad en el momento en que debemos hacer nuestros pendientes). Cambiar el enfoque con el que miramos lo planificado, no desde un punto de vista tedioso, sino que sea como un desafío personal que debemos lograr.

Ahora cuéntame ¿Cuáles son tus excusas más frecuentes para dejar todo para después?
Recuerda: “Tú podrás retrasarte, pero el tiempo no lo hará” Benjamin Franklin

Tú puedes ser el diferenciador para convertir el ocio en la formación que requieren las generaciones más jóvenes, aprende que es el “screentime” y cómo afecta a los niños.

Curso de Inteligencia Emocional

Toma las primeras clases gratis

COMPARTE ESTE ARTÍCULO Y MUESTRA LO QUE APRENDISTE

0 Comentarios

para escribir tu comentario

Artículos relacionados