Eventos históricos, incertidumbre y una ansiedad que se avecina. Esta ha sido nuestra realidad durante los últimos 2 años y no parece que vaya a cambiar pronto.
Dentro del contexto de la invasión rusa a Ucrania, no son solo estos dos países los que se ven involucrados. Todo el mundo está empezando a sentir los estragos de una forma u otra. Tanto el mundo físico como el digital se enfrentan a la fuerza contundente de esta guerra y ahora parece que incluso la estructura misma de nuestro Internet podría cambiar para siempre.
Empresas como Facebook, Twitter y TikTok ahora están bloqueadas para los ciudadanos rusos. Hay, además, informes de que la policía detiene a gente en las calles y exige ver sus teléfonos móviles para averiguar sobre qué están navegando.
El gobierno ucraniano se apresuró a aislar a Rusia de sus servicios como empresas tecnológicas individuales. Algunos líderes llevaron esta solicitud al siguiente nivel: pidieron cortar a Rusia por completo de TODOINTERNET. El pedido se ha vuelto tan fuerte, que gigantes tecnológicos como Meta, Apple y Google, que anteriormente se autodenominaban “políticamente neutrales”, ahora están suspendiendo el acceso a sus productos en Rusia. Efectivamente, Rusia está empezando a quedar “aislada de internet”.
¿Es prudente aislar a Rusia de Internet?
Resulta que no es tan simple. Una entidad llamada ICANN (Corporación de Internet para la Asignación de Nombres y Números), responsable de la gobernanza de nuestro Internet, no está nada contenta.
El lema de la ICANN es simple. “Un mundo, una Internet”. Este lema no les permite emprender acciones punitivas ni siquiera en circunstancias excepcionales. Este punto de vista también es apoyado por otro grupo de defensa de Internet llamado Electronic Frontier Foundation (EFF) que no cree en jugar con Internet en tiempos de guerra.
Piénsalo. Si los Rusos se ven privados de la herramienta de comunicación más poderosa que tenemos en este planeta, no se van a quedar de brazos cruzados. Esto puede convertirse en algo realmente peligroso. Además, vamos a seguir cancelando a todos los países que van a la guerra, lo que puede complicar aún más la situación en el futuro. Aquí entra un término que la mayoría de nosotros jamás había escuchado: splinternet.
¿Qué es Splinternet?
Es la posibilidad de quedarnos con una Internet diferente con sus propias versiones en cada país. Esto no es una idea nueva.
China tiene su propio Internet, a menudo denominado El Gran Cortafuegos de China. La Internet de Irán está controlada por una empresa propiedad de su gobierno y Rusia ha estado jugando también con su propia versión, llamada Runet. En 2019 probaron el sistema y es muy similar a una Intranet.
La idea es básicamente separar a todo el país de la Internet global. Y parece cada vez más que Rusia podría seguir adelante con su plan.
Toda acción tiene una reacción igual y opuesta: la tercera ley de Newton
Todo esto tiene consecuencias. Al comienzo de la publicación, mencioné que podríamos estar enfrentando un cambio masivo en la forma en que operamos Internet, pero esto ya está sucediendo.
Los países se están separando de la Internet global y, al menos desde el punto de vista de un gobierno autoritario, hay mucho por ganar en una versión propia de internet dictada por la agenda de cada gobierno. Esto podría exacerbar la lucha de poder que existe entre oriente y occidente.
Tim Berners Lee, el padre de Internet, creía en una Internet global que nadie puede controlar. Lo imaginó como libre de fronteras geográficas o políticas.
Su visión está siendo puesta a prueba por eventos recientes y solo podemos imaginar lo que podría suceder dentro de 10, 20 o 30 años.
Ravee Lakhmani
In-house English Teacher
Twitter: @fullstackingles