Tienes una tienda en línea, te has concentrado mucho en atraer más visitantes a ella y ahora quieres dar un paso adicional para mejorar las ventas, sin necesidad invertir más en publicidad o en descuentos.
En este momento es cuando te das cuenta de que necesitas trabajar para mejorar la conversión de tu tienda, eso en el mejor de los casos, porque puede que te sientas perdido y no sepas qué hacer para mejorar tus ventas sin invertir mucho más dinero. En este post te explicaremos cómo puedes mejorar la tasa de conversión y, de esa forma, tus ventas.
Empecemos por definir qué es la tasa de conversión [LA FÓRMULA BÁSICA DE VENTAS]. Una forma fácil de verlo es que la conversión es el porcentaje de personas que visitan tu tienda y realizan una compra.
Entre más alto sea este porcentaje, más vas a vender con el mismo tráfico que traes hoy en día a tu tienda. Suena muy bien, ¿no?
En este punto puedes estarte preguntando ¿cómo mejoro mi tasa de conversión? Con el siguiente proceso vas a poder hacerlo.
Ten en cuenta que es un proceso cíclico que debes estar repitiendo constantemente y que las mejoras van a ser graduales.
El proceso de optimización consta de cuatro pasos:
Veamos ahora cada uno de ellos.
En este paso debes identificar algo que podría mejorarse en tu tienda.
En el siguiente ejemplo, a través de la observación se encontró que los clientes estaban teniendo problemas para encontrar el botón de añadir al carrito que está en blanco. Surge la idea de cambiar el color del botón para hacerlo más visible.
Una vez que tienes la idea de optimización, debes crear con ella una hipótesis donde establezcan metas y parámetros que te permitirán establecer si la idea es exitosa o si no tiene mayor impacto en los resultados que quieres.
Para este ejemplo, la hipótesis sería: “Poner el botón de añadir al carrito en color naranja aumentará la cantidad de personas que añaden productos en un 20%”.
En este caso, es importante que ya tengas histórico del indicador que estás tratando de afectar. Acá tu indicador podría ser que el 30% de las personas que visitan las páginas de detalle de producto agregan un producto al carrito.
Si la hipótesis es cierta, este indicador debería subir al 36%. Este es el parámetro para validar o no la hipótesis.
En este punto ya tienes claro qué idea quieres validar y cuáles van a ser los parámetros de éxito. Ahora es importante que valides si la hipótesis es verdadera.
Uno de los métodos más usados para esto son las pruebas A/B, donde a una parte de tu tráfico le muestras la idea que tienes y a otra parte de tu tráfico le muestras la versión actual.
Herramientas como Google Optimize te ayudan a hacer esto, luego de un tiempo te indican cuál de las dos versiones es la ganadora. La gran ventaja de usar una prueba A/B es que pruebas tu idea contra la versión original en condiciones iguales para ambas.
Una vez ya has validado que tu hipótesis es verdadera, es decir que la idea que tenías efectivamente mejoró los indicadores de la manera que buscabas, es momento de
implementar los cambios para que todos los visitantes de tu tienda vean la versión ganadora
y de esa manera mejorar tu tasa de conversión.
Al final, una plataforma de e-commerce es un producto digital. Hay que estar validando e iterando constantemente. Gracias por la entrada!