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Emprende desde donde trabajas

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hace 6 años

Hoy todos quieren emprender, esto no necesariamente significa que cada persona tenga que tener su propia startup. En este artículo te cuento cómo puedes emprender desde donde trabajas.

Se denomina intraemprendedor (intrapreneur) a la persona que identifica oportunidades dentro de una organización, toma riesgos y lleva las ideas a la acción. Similar a lo que hace un emprendedor con la diferencia de que no lo hace en un ambiente externo.

¿Te gusta el lugar donde trabajas y quieres emprender? Quizás esta sea la forma de hacerlo.

Siempre he tenido el bichito emprendedor, por unos años tuve una empresa y actualmente trabajo en Platzi, donde puedo identificar oportunidades y llevar ideas a la acción; e incluso hay un hackaton una vez al año.

Cuando se lanzó el curso de Introducción a la Creación de Empresas y Startups no dudé en tomarlo y lo aprobé.

Si bien está enfocado en que emprendas tu propia empresa, si eres de los que quieren ser intraemprendedores este curso te ayudará a lograrlo.

Las preguntas iniciales
Como con cualquier emprendimiento o empresa nueva debes hacerte muchas preguntas. Comenzando con:

¿Qué problema que tiene la compañía donde trabajo puedo solucionar?

Quizás ayudar con la comunicación entre equipos, mejorar el desempeño de los trabajadores en planta o agilizar el trabajo del equipo de desarrollo/diseño.

La receta mágica para intraemprender

Te doy una pista: no existe tal receta. Para lograr emprender en el lugar donde trabajas necesitas lo mismo que los emprendedores que crean una nueva empresa: Pasión y ganas de tomar riesgos y aprender del fracaso.

Aunque no hay una receta mágica puedes usar estos consejos y materiales:

Elimina a tu primer enemigo: “No tengo tiempo”

Te conozco, porque me conozco. Esta es la primera excusa que surge siempre: “Ya tengo muchas responsabilidades en el trabajo, será una carga más, no tendré tiempo para hacerlo.” Aquí Paula Becerra te ayuda a quitarte esas excusas de la mente y aprender a administrar tu tiempo:

Valida el problema a solucionar

Si alguna vez fuiste a algún Startup Weekend este es uno de los grandes aprendizajes. Primero debes identificar a tu usuario: ¿a quién vas a ofrecer esta solución? ¿cómo es, qué hace? Ponle un nombre, un rostro. Esto te ayudará a que puedas ponerte en su lugar a cada momento.

Validar sirve para responderte la pregunta: ¿el problema realmente afecta a tu usuario?. Elabora tus hipótesis y prepara preguntas para hacerlas a tus posibles usuarios. Esto puedes hacerlo de muchas formas, una de ellas es la metodología Design Sprint, de la cual Nicole nos habla en este blogpost y también lo habla Karina Caudillo en el Curso de Introducción al Marketing Digital

No te enamores de la solución

Cuando creas que tengas una solución, escribela y atacala. Cuéntasela a otras personas y pideles que la ataquen. Preguntate: ¿es escalable? ¿le serviría a otra empresa con problemas similares? La metodología Lean puede ayudarte a hacer las preguntas correctas y puedes aprender sobre ella en el Curso de Desarrollo de Productos con Metodología Lean

Prototipa lo más rápido que puedas

¿Qué es lo mínimo que puedes hacer? Toma una hoja y haz un plan, un boceto de qué quieres realizar. ¿Es una app, una web o quizás una nueva forma de trabajo? Lo importante es que con tu mínimo producto viable tu usuario pueda probar la solución que vas a ofrecer.

Te recomiendo este artículo de Uriel Ramírez: Lo que aprendí de hacer un prototipo en diseño de producto.

No te metas en problemas

Si viste la serie Silicon Valley sabrás que si no averiguas sobre la propiedad intelectual de lo que crees con recursos de la empresa, podrías meterte en problemas. En una de las clases del curso de Introducción a la Creación de Empresas y Startups Christian habla de la importancia de ver el tema legal de tu emprendimiento.

Investiga a otros intraemprendimientos

Averigua cómo comenzaron otros proyectos similares. Te doy algunos ejemplos: Basecamp, surgió para ayudar al equipo de 37signals a organizarse mejor, Gmail fue producto de un proyecto personal de uno de los ingenieros de Google y hasta los famosos Post-it. (más sobre la historia)

Pitchea tu idea

Un pitch es una presentación breve de la solución que estás desarrollando. Al comienzo iniciarás presentando tu idea a tu equipo más cercano, a tus usuarios, luego a todo tu área y por supuesto a tus jef@s. Esta presentación debe lograr que tu usuario, tu equipo, tus jef@s se convenzan de que tu solución es lo que estaban necesitando. En el curso de creación de empresas Freddy te da consejos para que puedas vender tu idea a quien sea.

Consigue un equipo

No por nada el refrán dice que la unión hace la fuerza, consigue aliados ya sea de tu equipo o incluso de otros equipos que esten comprometidos con el proyecto y entre todos puedan sacar adelante el emprendimiento. Haz caso a Christian y Freddy y no emprendas solo.

Lo más importante: no te rindas

Así como los emprendedores, los intraemprendedores tienen muchos desafíos y es muy probable que los fracasos sean algo de todos los días; pero como mencioné al inicio no hay una receta mágica para emprender; ya sea creando una nueva empresa o emprendiendo desde donde trabajas, la única forma es: haz las cosas con pasión y nunca nunca nunca te rindas.

Gisse
Gisse
GisseJo

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hace 6 años

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