A mediados de este año me llegó la oportunidad de pertenecer como Líder de un equipo de trabajo, en donde yo estaría encargada de la Subgerencia de TI. La oferta surgió por mis logros durante mis 8 años en la empresa, me sentía muy a gusto siguiendo órdenes y cumpliendo con entregables que se me encomendaban dentro de los equipos a los que había pertenecido. Pero, cuando de repente se me ofreció esto, y cuando además supe que tendría un equipo a mi cargo, lo único que pude sentir fue: Alegría y Retos por cumplir.
Como dije, ser colaboradora era muy fácil para mí; simplemente cumplía mis tareas a cabalidad y me iba (algo que ahora sé que no está bien al ser colaborador en un equipo), así que cuando se me encargó este reto lo primero que hice fue prepararme como líder y poder aumentar mis habilidades y mejorar, todas esa cualidades que caracterizan a un líder como: escuchar activamente, recibir y dar feedback, delegar y lo que considero más importante, estar todos alineados para llegar a un objetivo en común.