Mariana es hoy nuestra invitada para contar su historia, ejerció la carrera de comunicación social por varios años en el sector de las editoriales, pero por cuestiones del destino la programación llamó a su puerta por medio de la Escuela de JavaScript y luego ingresando a Platzi Master.
Hace unas semanas se incorporó a una empresa como coordinadora de proyectos de tecnología y desarrolladora frontend, donde combina estos dos enfoques profesionales.
Esto me lo dice enfáticamente, ya que cuando se realizan estos cambios de carrera podemos pensar que vamos a “olvidar” lo que aprendimos en el pasado, pero nada más alejado de la realidad, como Mariana dice:
“lo más importante que yo he aprendido en todo este cambio de profesión, es que la industria está necesitando mucho que haya una transversalidad de conocimientos, las personas que vienen con un bagaje de otro estudio son muy necesarias, una empresa no funciona con solo programadores”.
Esta es la necesidad que ella cubrió en el lugar donde comenzó a trabajar,
“Es una empresa que se formó con un gerente desarrollador y un gran grupo de desarrolladores que han sido muy exitosos entregando resultados, pero necesitan habilidades gerenciales y yo puedo ofrecer esto”.
Esta es la reflexión que Mariana hace sobre su cambio de carrera,
“No por negar lo que estudiaron antes, no por decir que lo que antes estudiaron no les va a dar el sustento, si les va a dar, pero tráiganlo a la industria tecnológica. Cada vez se necesitan más carreras donde hay psicólogos, comunicadores, abogados, músicos, que sepan programación”.
En sus trabajos como comunicadora, Mariana ha tenido varios con editoriales importantes y muchas de esas veces se cotizaban productos de software o servicios web, siempre ella veía mucha fricción con el equipo de comunicación social de la empresa y con el equipo de tecnología, ya que no hablan el mismo lenguaje. Lo que los comunicadores saben muy bien, no saben cómo pedirlo a los programadores y viceversa, así que ella quería ser ese puente que hablara sus lenguajes y pudiera unirlos.
Con esto en mente, Mariana vio una oportunidad de crecer en su empresa cuando en una reunión con expertos internacionales del mundo editorial, se habló del problema que estaban teniendo con sus bases de datos y casi entran en pánico al no saber qué hacer e imaginando cifras astronómicas para contratar programadores, pero al verlos, ella lo único que podía pensar era en cómo podía ayudar a solucionar este problema.
“Vi que había un campo donde si yo aprendo lo que necesitan, puedo ser de mayor valor en las empresas que me gustan, cuando yo sepa las necesidades técnicas y también las necesidades del cliente podré hacer mejor el proceso”.
Un suceso muy fuerte y desolador ocurrió en la vida de Mariana hace dos años, su mundo se detuvo y cayó en la oscuridad más fuerte que un ser humano puede soportar, esto hizo que todo lo que ella pensó que era estable, no lo fuera y se replanteara cómo quería vivir.
"Cuando esto pasó, caí en cuenta que no podía tener un salario que no alcanzara a cubrir mis necesidades mínimas si en algún momento tenía que mantener a mi mamá, una cosa es uno quedarse satisfecho con un salario con el que vas a vivir tú solo, pero si tengo que responder por alguien más y mi carrera no me está dando las herramientas, “¿Qué estudio sí me las va a dar?”
Mariana, aconsejada por sus amigos, le dijeron que no debía resignarse a tener salarios bajos, sino que debía arriesgarse a estudiar programación. Su pareja le regaló una suscripción a Platzi y Mariana comenzó a estudiar, en este punto ella aún continuaba con su trabajo en comunicación social.
Mariana tiene una amiga llamada Iraida que le contó sobre la Escuela de JavaScript que iba a ser lanzada donde podría aprender este lenguaje desde cero,
“Yo soy muy miedosa y le dije que acaba de hacer el curso de fundamentos de programación ¡que cómo iba a meterme a hacer una Escuela!”.
Juntas ingresaron y Mariana dice que ha sido una de las experiencias más formadoras en su vida, hizo amigos que para ella son sus ángeles, ya que siempre le ayudaron. Aún recuerda cuando estaba muy desorientada al aprender sobre bases de datos y sus amigos se ofrecían para poder explicarle, que la comunidad fuera tan abierta y colaboradora es algo que la impresionó.
Esta es la analogía que hace Mariana sobre la industria TECH, ya que hay mucho que aprender, pero es mejor si se tiene una “brújula” que pueda guiarte, ya que si no tienes un norte terminarás perdido.
“Lo que me gustó de Platzi es saber que tenía un camino en un momento donde yo no estaba viendo ninguno, lo único que sabía era que había un abismo entre donde yo estaba, donde yo misma me veía y donde quería estar, Platzi me trazó una ruta que comencé a ajustarla a mi vida”.
Mariana obtuvo una invitación de Platzi Master y fue parte del primer cohort, aunque estaba un poco asustada por la gran responsabilidad que exige este programa, agradeció tener a sus coaches,
“A mi coach Lina la amo mucho, creo que ella no sabe cuánto la amo porque no se lo digo mucho. (risas) Ella tuvo muy claro lo que yo quería realizar en mi estudio, me dio el paso a paso”.
La misión de nuestros coaches es brindarles acompañamiento a nuestros estudiantes en las dudas que tengan,
“Realmente son de las personas que más valoro en Platzi Master, son muy comprensivos, se volvieron esa ancla para relajarme en momentos de ansiedad profesional, donde podía ser 100% honesta, donde podía decir que estaba hecha un caos buscando sobre un tema y ellos me dicen: tranquila, lee sobre esto, haz este curso, ve a este evento”.
“El tiempo” me dice tajantemente,
“Tienes que tener muy claro que esto es una inversión y si no estás dispuesto a invertir tu tiempo, no va a tener mucho sentido”.
En los primeros 3 meses de Platzi Master, Mariana estaba trabajando como comunicadora y podía dedicarle solo una hora al día para estudiar en el programa, hasta que cayó en cuenta que o se dedicaba de lleno al trabajo o a estudiar,
“Tenía coaches, unos cursos, muchas actividades por hacer, literalmente me estaban llevando de la mano y además hay una responsabilidad financiera, si no le estoy dedicando tiempo a esto, estoy perdiendo mi inversión y no aprovechando lo que puede darme mejor estabilidad”.
Luego de pensar esto, Mariana tomó la decisión de dedicarse tiempo completo al programa. Apoyada por su pareja, quien le dijo que si cumplía con su ruta de aprendizaje creada y entendía todo, al año ya tendría empleo, así que tomó esta decisión comenzando la cuarentena en Bogotá.
Mariana me cuenta que se levantaba a las 7:00 am de la mañana, hacía las labores diarias hasta las 9:30 am y no soltaba su estudio hasta las 9:00pm de la noche, tuvo que limitar las visitas a familiares y amigos, ya que debía enfocarse en Platzi Master y decidió que solo iba a dedicar una vez a la semana para visitar a amigos y familiares.
Mariana es tan buena alumna que su actual trabajo no lo consiguió por iniciativa propia, sino porque en Platzi Máster la propusieron. Los amigos de Mariana le dijeron que ella nunca iba a sentirse que estuviera lista, recuerda cuando uno de sus coaches le dijo:
“Aplicar a una empresa no significa que vayas a pasar, pero si te sirve para saber los requerimientos que están pidiendo y cómo son las pruebas”,
Desde que escucho esto Mariana sintió un alivio, ya que pensó que postularse iba a ser cada vez más sencillo, finalmente pasó lo que ella estaba esperando, su hoja de vida terminó llegando a manos de una empresa donde les encantó saber que sabía de frontend y que también era comunicadora con experiencia como tal,
“tenía un bagaje que justificaba hacer la inversión en mí, yo no sabía que eso podía pasar”.
“Ten la plena certeza que te van a esperar las oportunidades, cuando te lleguen, no es un tiempo o un será, van a estar ahí las oportunidades. Entonces tienes que saltar, tienes que entrar, tienes que meterle el tiempo, en la medida que sepas hacia a donde quieres llegar”.
Excelente testimonio y como fue el proceso de Mariana en Platzi Master, estoy super ansioso y estudiando full para Platzi Master Marketing Digital
So proud of you, babe ❤️
Es lindo ir viviendo este camino contigo.
Para todos los que lean esta entrevista, sepan que el cambio es posible
Todos tiene un grano de arena que aportar a este fascinante mundo de la programación, felicidades Mariana
Me siento u poco identificado con tu historia. Yo soy ingeniero en Robótica, e igual ando en búsqueda de saltar al mundo de la programación de lleno.
Este tipo de historias son las que motivan a seguir estudiando.
Una historia motivadora, no se trata de dejar el pasado atrás sino como este complementa e impulsa el nuevo reto que se traza desde ahora.
Excelente testimonio, sin duda estas historias motivan e impulsan a no rendirse, gracias por compartirla
Wow, súper inspirador sin duda.
Mucha suerte a Mariana y gracias Angie por compartir su historia.
Soy ingeniero mecánico y estoy iniciando en la programación, espero dar un salto en mi carrera aumentando mis conocimientos y competencias, gracias por compartir su experiencia que de seguro nos sirve de motivación a nunca parar de aprender
Me levantó la moral tu historia. Otra historia más de perseverancia. Ya no es casualidad. Exitos!!!
Conozco a Mariana, y es excelente persona. Si me lees, te envío un saludo gigante! 😄 😄 😃
me gustan estas historias 😃 agradecido con el de arriba.