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Consejos para convertirte en diseñador senior

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hace 2 años

Hay una pregunta bastante común en el mundo profesional y también de la UX que es: ¿cuándo se considera junior o senior a un perfil dentro de una empresa? ¿Qué o quién determina si alguien es, o no es, senior?

¿Qué es un senior?

Senior es aquella persona que con experiencia, conocimiento o compromiso, soluciona problemas. Y además, ayuda a otras personas de la organización a crecer. Lo dije en este tweet y lo vuelvo a confirmar.

Hay una cierta tendencia a simplificar el rol de la persona senior, reduciendola a alguien capaz de solucionar problemas técnicos. Es una visión reductiva ya que solo los conocimientos técnicos o llevar un cierto tiempo en una empresa o en tu rol, no te hace senior.

Por eso creo que la pregunta “¿cuántos años sirven para ser senior?” no tiene mucho sentido.

Ser profesional senior tiene un significado que va más allá del nivel de experiencia, que por supuesto es necesario. Hay que añadirle algunas aptitudes que una persona tiene con respecto a la empresa y al equipo. Se podría decir que la manera de identificar un perfil senior es si cuando hay un problema, la persona además de levantar la mano para comunicarlo, viene con una propuesta de solución.

No quiere decir que la solución corre a su cargo pero sí, el haberla buscado y planteado. Resumiendo: el o la profesional senior es aquella persona que sabe lidiar con problemas de manera constructiva.

Ser profesional senior también es tener la capacidad de hacer crecer profesionalmente a tu equipo de trabajo. ¿Cómo? Ayudándoles a reconocer prioridades en función del impacto que las cosas tienen a largo y a corto plazo, guiándoles a poner el foco sobre lo verdaderamente importante y exigiendo y manteniendo un estándar de calidad alto en su trabajo.

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¿Qué hace un perfil de diseñador senior?

El trabajo de una persona senior es mentorizar a la gente que tiene falta de conocimientos necesarios para el desarrollo de la actividad, ayudándoles a crecer, dejando su propio ego “reposar”.

Ser profesional senior es saber tomar decisiones en momentos difíciles como gestión de conflictos, falta de recursos etc. sin depender del o de la manager.

Ser profesional senior también es tener la capacidad de reconocer lo que está fuera de su campo o alcance y comunicarlo. Algo que es muy común y normal que las personas junior no sepan hacer, porque ser junior es también no saber lo que no se sabe.

Consejos si eres un perfil senior en diseño

1. Prepara bien el onboarding del perfil junior

Invierte tiempo en preparar un buen onboarding. Piensa en todo lo que te hubiese gustado a ti conocer nada más entrar en la empresa o en el departamento y trasládalo de manera clara en un documento que te sirva como base para guiar a la persona junior en la fase de aterrizaje.

El tiempo que inviertas en un onboarding bien hecho, será tiempo ahorrado de cara al futuro. Te ayudará a crear mejores equipos de trabajo, más cohesionados y orientados a objetivos. En este post te explico “Qué es un onboarding y por qué es necesario en equipos UX”.

2. No metas demasiada carne al fuego

Cada persona tiene sus tiempos de asimilación y hay que respetarlos. Explica los argumentos de uno en uno, para que la persona junior tenga el tiempo de asimilarlos. Si imaginamos un gráfico, la relación entre temas tratados tiene que ser inversamente proporcional al nivel de detalle de cada argumento.

3. Comunicate de manera eficaz

Una buena comunicación se da si el ambiente es rico de energías positivas y sin prejuicios, donde cualquiera se puede sentir libre de preguntar y participar en discusiones sin temores. Por lo tanto:

  1. Sé constructivo. No uses frases como “Se hace así” o “¿Por qué lo has hecho así?”. Busca alternativas más empáticas como “¿Has considerado este enfoque?” etc.
  2. Adapta tu nivel comunicativo a la experiencia de tu interlocutor o interlocutora. Entiende cuál es su nivel de preparación y adopta la exposición según sus feedbacks. Busca experiencias comunes sobre las cuales hacer ejemplos e introduce metáforas. Haz que la sesión sea productiva para ambos perfiles y asegurate que el perfil junior tenga referencias claras.
  3. Haz introspección. Nadie nace senior. Tú también has sido junior. Y cuando lo eras, en algunas situaciones particulares, habrás experimentado estados de ánimo y emociones contrastantes, algunas no positivas. Intenta prever estas condiciones de estrés para intentar contenerlas y que no sean un obstáculo en vuestra comunicación.
  4. Date a conocer. Comparte ideas, experiencias tanto positivas como negativas. Conocerse ayuda a la comunicación ya que hace que esta no sea unilateral.

4. Asignación de las tareas

Asigna tareas coherentes con la experiencia de los junior y añade algo más que sea nuevo. Varía entre diferentes actividades, cambiando ámbitos de conocimiento. Al principio puede ser difícil entender que puede llevar a cabo solo ese perfil, pero si nunca se empieza nunca se sabrá. Con el tiempo, aprenderás a conocerle desde el punto de vista más técnico de la profesión y saldrán a la luz sus preferencias e inclinaciones que te harán el trabajo más fácil.

En el perfil junior, poca seguridad y baja autoestima generadas por la frustración son un indicador muy fuerte de que las tareas asignadas están por encima de su capacidad. Un buen perfil senior tiene que conseguir llenar ese gap que causa la frustración con una o más sesiones de mentoring que ayuden al junior a ser autosuficiente.

También es importante reconocer si esta inseguridad y baja autoestima son causadas por componentes emotivos (como miedo a lo nuevo y desconocido) o por el hecho de que se le ha asignado algo encima de sus potencialidades: si el factor es solo emotivo, no relacionados con problemas técnicos, la persona senior no se tiene que dejar influenciar y tiene que guiar a la persona junior de manera gradual, sin arrastrarla.

Consejos si eres un perfil junior que quiere ser senior

1. Comunicate de manera inteligente

Hacer preguntas es esencial. Es importante que no tengas miedo en levantar las manos y preguntar. Luego será la persona a quien preguntes que decida cuándo y cómo contestar. Además de sentirte libre de preguntar, tienes que aprender a formular las preguntas de manera correcta. Hay que pensar que a menudo la persona a la cual pones las preguntas está haciendo otra cosa o está concentrada en otro problema.

Por ejemplo, si la pregunta es “¿Cómo se hace esta tarea?”, es probable que la respuesta tenga que ser elaborada y requiere de tiempo. Aquí entra el concepto de comunicación smart o inteligente. Siguiendo con el ejemplo de la pregunta de arriba, el enfoque ideal sería primero analizar la tarea según propios medios y capacidad.

Es probable que la falta de experiencia te lleve a tener obstáculos que te impidan hacer la actividad pero, el solo esfuerzo hecho en analizar la tarea, te hará capaz de hacer preguntas inteligentes.

El concepto clave es fundamentalmente uno: introducir en la pregunta (allí donde es posible) una parte de la respuesta o idea de una solución y explicar cómo y cuánto se ha hecho para abordar la tarea. Esto te hará rápidamente más independiente.

2. Divide y vencerás

El enfoque “Divide y vencerás” (de la máxima latina usada por el Emperador romano Julio César) es el modelo por excelencia para dirigirte hacia la solución de cualquier problema. No te asustes por un problema complejo: cógelo, pártelo en muchos más pequeños, a tu altura, y abórdalos de uno en uno.

3. Tómate una pausa

Si no sabes como seguir, estás bloqueado o bloqueada y no sabes por donde tirar, párate y refresca la mente. Levántate de la silla y tómate una pausa. Al volver, verás el problema desde otro punto de vista y se abrirán nuevos caminos.

Esperamos que nuestra experiencia con perfiles senior y junior del mundo UX y los consejos que os hemos brindado en este post, os ayuden a crecer profesionalmente y encontrar el camino correcto cuando alguna piedra se ponga en vuestro recorrido.

Daniel
Daniel
torresburriel

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