Harry Potter es un fenómeno mundial, eso no se puede negar. Esta serie de libros que dio el brinco a la pantalla grande hace 20 años, cambió y marcó la vida de varias generaciones. Aunque no estemos de acuerdo con las opiniones polémicas de su autora, es imposible negar estos hechos.
Aquí tenemos a un protagonista diferente a lo que habíamos visto antes. Él no es un paladín que está dispuesto a todo, al contrario, al inicio de los libros está muy seguro de que todo es un error. Tiene el miedo persistente de que el sueño acabe y lo manden de regreso con sus tíos. Por todo esto, creo que Harry Potter sufre del Síndrome del Impostor.
Podemos definir al síndrome del Impostor como esa vocecita en nuestra cabeza que no deja de repetir ciertas frases.
"No mereces estar aquí, hay gente que sí y les estás quitando su lugar".
"No sabes lo que haces, te vas a equivocar y todos te van a odiar por eso".
"Estás aquí por suerte, no porque lo merezcas".
"Si te conocieran de verdad, te correrían".
“La cámara de los secretos ha sido abierta, enemigos del heredero temed”.
(Esta última frase estaba en una pared, no en la cabeza de Harry, pero igual da miedo).
En el caso de Harry Potter, los traumas derivados de una infancia carente de afecto, le hacen dudar por completo de sí mismo. La gente no deja de repetirle cosas positivas sobre sus padres y como es “El niño que vivió”, sin embargo, esto no le sirve de nada. Él hubiera preferido tener padres vivos a padres valientes. Sobrevivir siendo un bebé tampoco lo ve como un logro. No fue algo que hizo de manera consciente, no lo recuerda y no lo podría volver a hacer.
Durante los dos primeros libros, no fue su habilidad lo que lo salvó, fueron sus amigos y los muchos Deux Ex Machina de la autora. Es apenas en el tercer libro donde logra salvar su vida y la de otros, usando un hechizo difícil y poderoso, que le costó perfeccionar. Las siguientes veces que lo usa, ya notamos un progreso en su confianza.
Parte de la trama del quinto libro, es la educación negligente y carente de enfoque práctico a la que estan sometidos. La solución de Hermione es formar un grupo de aprendizaje comunitario estudiantil, llamado ED (Ejercito de Dumbledore). Ante la falta de un adulto competente que los pueda ayudar, la mejor opción es el mismo Harry Potter. En esta parte tenemos todo un párrafo de Harry explicando como él no es capaz de enseñar nada, y tampoco ve posible que alguien pueda o quiera aprender algo de él. Todo esto a pesar de haber pasado los últimos dos libros luchando por su vida en situaciones mucho más peligrosas y reales que cualquier otro compañero de escuela, logró dominar hechizos que le han permitido salvar su vida y la de terceros, sin mencionar que se ha batido en duelo contra el mismo Voldemort. Y aún así, no se siente capaz de nada.
Son sus amigos los que le recuerdan lo que ha logrado y lo impresionante de muchas de estas cosas, aun considerando el gran grado de suerte que ha tenido. Para sorpresa de nadie, las clases salen bastante bien, pues el Síndrome del Impostor de Harry, no le permitía ver que, efectivamente, el nivel de sus compañeros no era como él esperaba y sí necesitaban su ayuda.
Así es como funciona el Síndrome del Impostor. Nos hace menospreciar nuestros logros y conocimientos. No nos permite ver que posiblemente si hemos llegado más lejos que muchos otros y que, efectivamente, sí estamos capacitados para realizar ese trabajo.
Vencer el Síndrome del impostor no es cosa de magia. Necesitamos crear rutinas de autocuidado, donde podamos poner en verdadera perspectiva nuestras habilidades, y que las acompañemos con una buena dosis de Nunca para de aprender. Solo así podremos tener el valor necesario para intentar eso para “lo que no estás listo”. Cuando empieces a acumular pequeños logros donde solo esperabas fracaso, es ahí cuando este síndrome empieza a calmarse y puede llegar a desaparecer.
Si en este punto de tu vida, tú te sientes como Harry Potter, entonces es momento de que tomes nuestro Curso "Cómo superar el Síndrome del Impostor" y aprendas a manejar esas voces en tu cabeza. A menos que hables Parcel, en ese caso contacta al equipo Platzi porque andamos buscando un profesor calificado.