Si lo primero que notaste en este título son los errores ortográficos, una disculpa. Hoy no estuvo nuestra editora.
Si llegaste aquí por un video mal hecho que publicamos, perdón. Pero hoy no estuvieron nuestras productoras.
Si lo que te trajo a esta nota fue esa imagen mal ejecutada que viste en nuestras redes sociales, lo sentimos. Es que nuestras diseñadoras se fueron a paro.
Si encontraste errores en nuestra plataforma, te pedimos una disculpa. Nuestras programadoras no están laborando hoy.
Hoy también teníamos planeado comenzar un par de nuevos cursos, pero nuestras profesoras decidieron sumarse al paro del 9-M.
De hecho, hoy, 9 de marzo, las mujeres mexicanas de Platzi faltaron. Están protestando.
Y pareciera un enorme problema que nuestros videos estén mal hechos, que nuestras notas tengan errores ortográficos o nuestras imágenes no se vean bien. Pero, definitivamente, no está ni cerca de ser un problema tan grande como que diario asesinen a 10 mujeres en México.
La violencia de género en México y en otros países de Latinoamérica ha sido un problema gigantesco desde hace años. Un problema que ni los gobiernos ni la sociedad parecen dispuestos a enfrentar. Diario, las mujeres son acosadas, invisibilizadas, abusadas, agredidas, privadas de su libertad y asesinadas. Parece que nadie está haciendo algo para detener esto.
Si denuncian, son revictimizadas por un sistema machista y violento; si no lo hacen son culpadas por una sociedad misógina. Y mientras tanto en sus escuelas, sus oficinas, sus calles, su transporte y sus propias casas son violentadas de diferentes maneras.
Por eso hoy, un día después del Día Internacional de la Mujer, decidieron irse a paro. Protestar contra este sistema. Suspender todo tipo de labores. No ir a sus trabajos, no asistir a sus escuelas, desconectarse de las redes sociales y no salir a las calles. Así de sencillo: desaparecer.
Porque, en México y en Latinoamérica, cualquier día podría pasarles eso. Solo desaparecer. Ser borradas. Dejar de existir por culpa del machismo y distintos tipos de violencia que existen y que no haya consecuencias.
Hoy desaparecieron todas para que ninguna lo vuelva a hacer. Para que su silencio y su vacío duela tanto como a ellas les duele tener que vivir en un país donde no las respetan. Donde las odian y las matan sólo por ser mujeres. Hoy desaparecieron con la esperanza de que cambie algo.
En Platzi, más del 50% del equipo está conformado por mujeres. Programadoras, diseñadoras, productoras, profesoras y líder que hoy nos duele mucho su ausencia.
Pero nos dolería más que no fuera por un paro. Nos dolería más que desaparecieran de verdad.
Así que hoy, al resto del equipo, nos toca escuchar este silencio que dejaron las mujeres hoy, además de informarnos y discutir entre nosotros para intentar entender la situación. Nos toca asumirnos responsables del problema y empezar a actuar para ayudar a resolverlo.
Platzi funciona gracias al trabajo de diseñadoras, ingenieras, comunicadoras, científicas de datos y más. Platzi no funcionaría igual sin ellas.
Taller de Responsabilidad Periodística