¿Cómo hacer videojuegos?

Seguramente ya has escuchado que la industria de los videojuegos tuvo el doble de ganancias que Hollywood en 2017. La industria de los videojuegos viene pisándole los talones a la gran pantalla desde desde el 2013, y podrías creer entonces que crear tu propia empresa de videojuegos es el futuro, pero la realidad es que hacer un videojuego no es fácil.

Al menos no por tu propia cuenta, quiero decir.

Si te apasionan los videojuegos, considera formarte en alguna de las siguientes disciplinas y formar un equipo de trabajo con personas que tengan habilidades complementarias:

(Todas las puedes aprender en la Escuela de Videojuegos de Platzi):

Diseño de juego: Aquí es donde todo comienza, proponer mecánicas, una historia, estilo y lo dejas lo más claro posible para todo tu equipo.

Narrativa: Aquí debes contar una historia memorable, tu videojuego debe motivar al jugador a avanzar al siguiente nivel.

Arte: Desde el personaje principal, personaje secundarios, villanos, escenarios, texturas, menús; siempre necesitas crear el arte conceptual de tu videojuego.

Gráficos: Aquí creas los elementos de los mundos, llevar el arte conceptual al pixel art, 2D, modelado 3D, o hasta alguna combinación y generas los assets que utilizarás en tu motor de juegos.

Audio: aquí es dónde se generarán sonidos: melodías, ambientaciones y efectos que serán recordados por generaciones

Programación: Todo videojuego tiene al menos un mínimo de interacción, esta se escribe con algún lenguaje de programación como C# o C++

Creación del motor de juegos: Es el software que utilizamos para crear nuestros videojuegos y también es el software que se encargará de unir todo lo que hemos hecho y se los pasará a nuestro CPU y nuestra tarjeta de video que generarán las imágenes de nuestros mundos.

Diseño de niveles: Aquí es donde unimos el audio, los assets, la interacción programado y demás elementos para generar los niveles en donde se va a llevar a cabo la progresión de nuestro videojuego.

Control de calidad con pruebas: Por último tenemos el testing, que puede ser a nivel de código utilizando herramientas que ayudarán a evitar bugs de forma preventiva o a un nivel más práctico, probando el juego y buscando cualquier posible error que se haya escapado hasta la etapa final de nuestro juego.

¿Te animas o te interesa entrar a esta industria? Cuéntame en la sección de comentarios.