La separación entre tu hogar y tu trabajo es quizás la parte más difícil del trabajo remoto, particularmente si lo haces desde tu casa, así que manejar ese switch entre modo trabajo y modo descanso es una pieza clave del éxito, para ello, te traigo de manera breve algunos rituales que pueden ayudarte a entrar en modo trabajo si tu mente tiene algún problema para ello:
Salir y volver a entrar a tu hogar
Algunas personas necesitan experimentar ese aire fresco para poder sentir que en verdad ese cambio de mentalidad quede en firme, en la medida de lo posible, vístete, toma tus llaves y sal de tu casa, quizás da una pequeña vuelta al parque, pasea a tu perro o bota la basura antes de volver a entrar, con eso emularás el proceso que atraviesa tu mente cuando abandonas tu casa y entras a la oficina todos los días.
Define un código de vestimenta
Si bien la ropa es una de las ventajas de trabajar desde casa, usar algún tipo de prenda (como una camisa o un pantalón) para sentarte a trabajar puede ayudar a tu mente a literalmente sentirse que está en modo trabajo.
Define bien tu espacio de trabajo y respétalo
Las habitaciones tienen un propósito, cada espacio de tu hogar debe estar definido para algo, tu comedor es para alimentarte, tu alcoba para dormir y quizás alguna silla o escritorio (o quizás una sala completa) pueda definirse como tu espacio de trabajo, y lo usarás solo para ello. Trata tu zona de trabajo en casa como lo harías con tu oficina, no te sientes en tu silla sin haberte bañado, vestido y desayunado, esto ayudará a que tu mente sepa que llegados a este punto, sabe a qué atenerse.
En general, los rituales de trabajo son muchos, pero son una buena forma de poder separar tu tiempo de descanso de tu tiempo de trabajo, esto además de ayudarte a ser más productivo en tu hogar puede ayudarte a descansar mejor cuando tu cuerpo realmente lo necesite.